Antes de explicar la relación entre la depilación láser y la exfoliación, es importante que conozcas de qué trata la exfoliación.
La exfoliación es el proceso de remover la piel muerta, suciedad o grasa que se acumula en la capa más superficial de nuestra piel.
La exfoliación puede realizarse mediante procesos físicos o químicos, esto va a depender de las necesidades de tu piel y de lo que consideres mejor para que recupere su brillo natural.
La exfoliación física consiste en eliminar las células muertas de la piel mediante fricción, se puede hacer con cremas, geles o jabones que contienen micropartículas o también puede emplearse esponjas, lufas o guantes de microfibras acompañados con jabones o gel.
Por su parte, la exfoliación química es más profunda, como lo indica su nombre, corresponde a la aplicación de productos químicos para poder quitar o remover las células muertas.
Este proceso va a depender de tu tipo de piel, por lo general los dermatólogos no recomiendan exfoliar la piel más de 1 vez al mes, y sólo con mayor frecuencia en codos y rodillas, para no dañar la capa de piel más superficial (estrato córnea).
Estos dos tratamientos están muy ligados, ya que las personas que realizan depilación láser deben exfoliar la piel a la semana después de la sesión de depilación para ayudar con la caída del vello inerte o quemado, y posteriormente se debería efectuar la exfoliación como máximo una vez cada 7 a 10 días, para poder eliminar el tallo del vello destruido que va simulando crecimiento, y sólo hasta que se produzca la caída del pelo.
Gracias a la combinación de estos dos procesos tu piel se verá más limpia, suave, tersa y libre de vellos.
La exfoliación luego de la depilación láser es un proceso sencillo, puedes efectuarlo en tu baño habitual con esponjas, guantes o lufas, de la siguiente manera:
1.- Lava el área depilada con abundante agua y jabón preferiblemente neutro.
2.- Exfolia la piel humedecida ejecutando movimientos suaves, no es necesario que el roce sea fuerte o agresivo.
3.- Enjuaga con abundante agua y seca con toallas aplicando pequeños golpes, evitando fricción.
4.- Culmina humectando la piel con cremas o lociones hidratantes.
Para evitar la irritación por exfoliación y depilación láser, es importante que la hagas en los días indicados, ya que tu piel estará más sensible, incluso hasta 3 días seguidamente de la sesión.
Si notas que no se cayeron todos los vellos posteriormente a el tratamiento de depilación, igualmente debes esperar los días recomendados para poder exfoliar la zona, te recordamos que sólo son restos del pelo destruido con el láser.